La escuela Wu shu tao (camino del arte marcial en chino) protagonizó una nueva acción solidaria en Reyes, con la entrega de regalos en el comedor comunitario Gotitas de Esfuerzo, en contacto con su titular Iris Miñoz.
Fue una más de las movidas que realizan durante todo el año, precedidas por otras en Pascua, el Día del Niño, y en respuesta a pedidos de ayuda de familias que perdieron su vivienda con incendios. La próxima actividad comunitaria será la entrega de útiles escolares, que ya están colectando; para seguir con ropa de invierno para los hogares más vulnerables.
“Buscamos siempre un impacto fuerte en la gente que lo necesita. En la escuela somos 300 familias, un motor social importante, y estas acciones tienen que ver con la filosofía que compartimos, que va más allá del aprendizaje de artes marciales”, explicaron a Bariloche2000 los referentes de Wushu tao Martin Rossano y Jenifer Fraga.
La escuela tiene una fluida comunicación interna e interacción en sus integrantes y alumnos, pero además extienden lazos a la comunidad a través del Instagram @escuela.wushutao o el contacto de WhatsApp 2940454948.
Difusión
Se enfocan en cuatro disciplinas: Arte marcial, Arte marcial y esgrima oriental, Tai chi, y dao inn.
Surgió hace 15 años, por iniciativa del maestro Javier López, con un inicio muy modesto. El propio maestro fundador vivía en una plaza y convocaba a sus discípulos en cualquier espacio en el que pudiera enseñar.
La escuela creció, trascendió a otras ciudades (como Córdoba, San Luis y Villa La Angostura), y se hizo internacional con sede en Brasil.
“Aprendemos a través del cuerpo como un mapa emocional, al trabajar con el cuerpo logramos una transformación que se lleva a la vida”, explicaron.
Parte de este desarrollo se expresa en clases gratuitas en distintos lugares durante todo el año, cuyo calendario puede consultarse en una de las imágenes de esta nota.
En la ciudad Wu shu tao tiene sedes en Lonquimay y Tupungato (Melipal), Otto Goedecke y Costanera (centro) y en el kilómetro 8,500 de la Avenida de los Pioneros.
Comentar