Este sábado, Matías Santana abandonó la cárcel de Esquel tras ser beneficiado con el arresto domiciliario, una decisión que el Tribunal Oral Federal de General Roca justificó por razones familiares y el bienestar de sus hijos pequeños. Santana, quien permaneció prófugo por más de un año antes de ser capturado en febrero, cumplirá su condena en su hogar en Bariloche, donde deberá someterse a inspecciones periódicas y cumplir con estrictas condiciones para evitar el riesgo de que la medida sea revocada.
Santana, conocido públicamente como el "mapuche de los binoculares" por su participación en los conflictos en Villa Mascardi, fue detenido en febrero de este año en una intersección de las calles Anasagasti y Elordi, en pleno centro de Bariloche, luego de permanecer prófugo desde octubre de 2022. Durante su tiempo en la clandestinidad, Santana estuvo involucrado en la ocupación ilegal de terrenos en Villa Mascardi y en un ataque incendiario contra una vivienda particular en la misma zona.
El Tribunal evaluó diversos factores antes de concederle la prisión domiciliaria, destacando la necesidad de proteger el interés superior de los hijos menores de Santana. La situación económica del núcleo familiar también influyó en la decisión de permitir que Santana continúe cumpliendo su condena desde su hogar.
La historia de Matías Santana en los conflictos de Villa Mascardi es extensa. Desde 2017, integró la comunidad Lafken Winkul Mapu, un grupo que estuvo implicado en varios episodios violentos en la región, como la ocupación de terrenos de Parques Nacionales y la quema de propiedades. Estos eventos culminaron en el desalojo forzoso de los terrenos en octubre de 2022, cuando Santana y otros miembros de la comunidad lograron escapar de las autoridades.
En febrero de este año, tras más de un año en la clandestinidad, Santana fue detenido en Bariloche. Su captura fue clave, ya que su participación en actos de usurpación y atentados, incluidos los incendios en Villa Mascardi, lo habían convertido en una figura central en los conflictos de la zona. Sin embargo, esta no era la primera vez que enfrentaba la justicia. En 2018, fue condenado por causar daños en el edificio judicial de Bariloche y por agredir a siete efectivos de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) durante el juicio de extradición del activista mapuche Facundo Jones Huala.
Con el beneficio de la prisión domiciliaria, Santana deberá cumplir estrictas condiciones impuestas por el Tribunal, que incluyen inspecciones periódicas en su domicilio y la prohibición de ausentarse sin autorización previa. En caso de incumplir con estas condiciones, el Tribunal podría revocar el beneficio y ordenar su regreso a prisión.
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