La Lof Huala We y Lof Tambo Baez repudiaron y rechazaron la ocupación de un predio en cercanías a la Playa del Viento que, según reveló el acusado, servirían para el pastoreo de caballos. La declaración de las comunidades Mapuche se da en medio de rumores que apuntaban a un reclamo por tierras ancestrales, que finalmente quedaron descartados.
A través de un comunicado, ambas comunidades se dirigieron a los vecinos que habitan en cercanías a la Playa del Viento y el arroyo Casa de Piedra, y dijeron sentirse afectadas “como así también quienes habitan dicho espacio, ya sea animales nativos y plantas medicinales (lawen)”.
Según comentaron, la presencia de una casilla y otros animales forman parte de una “ambiciosa especulación” y apuntaron contra Gregorio Valentín Robles y Sergio Moscoso, siendo este último acusado de ser “su títere en escena hoy disfrazado de supuesto pastoreo. Donde pretende apropiarse de manera fraudulenta mediante estafas del área protegida y espejos de agua”.
El escrito que presentaron las comunidades Mapuche también acusaron que la maniobra incluye “un negociado que destruirá el bosque, limitará el uso recreativo y aniquilara la biodiversidad”. Además denunciaron la tala de especies nativas en un lugar en el que “se ven salir camionetas trasladando postes”.
“Con el asentamiento de 12 equinos se van a ver perjudicadas las especies que habitan de forma natural el bosque, ya que de público conocimiento pretende traer un total de 37 equinos”, mencionaron.
En la nota también aseguraron que se ven “en la obligación de proteger el itrofolmongen y parte de nuestra espiritualidad se ve afectada. Hacemos un llamado a toda la sociedad a estar atentos de cualquier eventualidad, de la venta del territorio con nuestro futuro en él, por la ambición de unos pocos”.
El caso tomó estado público días atrás, luego de que un grupo de vecinos denunciara la presencia de un hombre y sus caballos en una franja cercana a la Playa del Viento. El municipio tuvo una primera intervención pero luego dio paso al Ejército Argentino, ya que las tierras en las que se definió un área de pastoreo serían propiedad del Estado Nacional.
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