El Padre Pepe Lynch informó que se va de Párroco a El Bolsón, porque al párroco de allá lo nombraron obispo auxiliar en Lomas de Zamora. Están esperando algún sacerdote que quiera seguir la posta en Emaús. Seguirá presente en la parte organizativa pero no podrá estar con presencia constante y continua y sobre todo actuando cuando se requieren decisiones importantes.
El padre Pepe comentó que "da la impresión que en Bariloche están ls cosas relativamente tranquilas, la Navidad llega con ese mismo espíritu".
Lamentó que hay muchas cosas importantes que le han quitado tiempo para organizar gestos más concretos, como un regalo para cada muchacho del Emaús. "En algunas cosas estos hombres de la calle son como niños", explicó y manifestó que incluso "un poco la sensación de estar corriendo detrás de pequeñas cosas en lugar de dedicarse a otras cosas".
Emaús está viviendo un tiempo lindo, "quizá muy extraño es el comportamiento de la gente de afuera que está viniendo a Bariloche. Atendemos a la gente en situación de calle de Bariloche, marcado por el alcohol o la droga, pero también a quienes vienen a buscar trabajo". Manifestó que anoche eran más de 36 y días atrás se llegó a los 40, por lo cual tuvieron que poner colchones en el piso.
"No podemos tener más gente, estamos con esa pequeña inquietud", sostuvo y expresó que les dieron unos días pero en los primeros días de enero quienes no son de acá y vienen a buscar trabajo deben empezar a arreglarse solos porque tienen necesidad de atender a la gente de la ciudad. Lo mismo pasa en Betania. "Se nos hace exigente en Navidad, año nuevo y verano", comentó porque los voluntarios salen de vacaciones y demás.
Manifestó que tienen una organización que si bien no es perfecta "es la manera de ofrecer la alegría de Belen en estas fechas".
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