El fiscal Martín Lozada dialogó con el móvil de Noticiero Seis y comentó cómo fue el proceso de acusación del hombre de nacionalidad chilena, que vivía hace varios en Argentina. Puntualmente, Monje Contreras está condenado como autor del delito de abuso sexual agravado a una niña.
Lozada detalló: "Enfrenta un proceso judicial durante en cuyo contexto se ha declarado su responsabilidad penal por hechos constitutivos de violencia sexual, concretamente delitos cometidos contra la integridad sexual de una niña menor de edad".
Asimismo, indicó que un tribunal integrado por los jueces Romina Martini, Martín Arroyo y Marcelo Álvarez Melinger ya había declarado la culpabilidad a Monje Contreras, mientras que en estos días se había habilitado el segundo periodo del proceso que es el juicio de cesura, donde se discutiría la pena que le corresponde al hombre.
En este sentido, Lozada explicó que Monje Contreras no acudió a una de las audiencias de fines de febrero y al día siguiente el tribunal ordenó que se vaya a su domicilio a notificarlo. En ese momento se dieron cuenta que el hombre se había fugado y es por eso que el tribunal declaró su rebeldía y dispuso una orden de detención que fue comunicada a Interpol.
Además, trabajan en la búsqueda del fugado Prefectura Naval Argentina, Gendermaría Nacional, Policía de Seguridad Aeroportuaria, Policía Federal y la Dirección Nacional de Migraciones, ya que pesaba una prohibición de salida del país para el abusador. Con respecto a cómo viene la búsqueda, Lozada señaló que "hemos llevado adelante en el día de ayer cinco allanamientos en el radio urbano de la ciudad y los cuales dieron negativos, y se ha producido el secuestro del vehículo de esta persona".
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Por otra parte, el Fiscal Jefe dio los fundamentos de porqué Monje Contreras no se encontraba ya con prisión preventiva, ante ya contar con una condena de abuso sexual agravado a una menor. "Existe un principio procesal general que dice que la libertad del imputado es la regla durante el proceso y que, salvo casos excepcionales, el imputado permanece en libertad durante el desarrollo del proceso".
Aclaró que "esto es muy debatible" y que "son leyes que construyen los legisladores en el Congreso de la Nación". Al respecto expresó que a las personas se les impone la prisión preventiva en dos casos muy puntuales: uno cuando hay peligro de fuga y otro cuando las personas pueden obstaculizar el normal desarrollo del proceso. En el caso de Monje Contreras "no se le impuso la prisión desde el momento mismo de la investigación y que la libertad del sospechado se mantiene hasta que haya una sentencia".
"Juan Carlos Monge Contreras a lo largo de todo el proceso había estado a disposición de los tribunales y de la Fiscalía. Cada vez que había habido una audiencia había comparecido, ya que respetaba el domicilio, respetaba el teléfono y no habíamos tenido indicadores; si hubiésemos tenido indicadores de que esta persona iba a darse a la fuga, por supuesto que nos hubiésemos adelantado y hubiésemos pedido la presión preventiva", agregó.
Por último, Lozada afirmó que "el sistema de justicia criminal está persiguiendo penalmente y está procurando la individualización y la detención del señor Juan Carlos Monje Contreras, con todos los recursos a su cargo, con todos los dispositivos de seguridad, y con todas las fuerzas de seguridad del Estado e internacionales haciendo referencia a puntualmente al hombre; no hacemos referencia ni a su familia, ni a su madre, ni a su padre, ni a sus hijos y tratamos de que esta información que es muy concisa, muy precisa y muy particular, no afecte los derechos de la víctima".
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